La frase “perla del desierto” es tomada desde los cantos dedicados a la virgen del Carmen en el contexto de la fiesta de la Tirana. Una figura de madre, descrita como protectora, acogedora y cariñosa. La perla, una piedra preciosa formada a través de la condensación del tiempo, una metáfora de algo raro, fino, admirable y valioso, es sostenida en la obra, por un portal construido desde las formas del desierto. En la estructura, se encuentran objetos de diferentes bailarines de la fiesta.