Este año, PANTRANSA destaca la participación de la artista chilena Natalia Montoya Lecaros (Chile, 1994), propuesta por SPECIFIC como residente invitada. Su inclusión responde a una línea de investigación que vincula el carnaval con las fiestas populares andinas, particularmente La Tirana, festividad de fuerte arraigo en el norte de Chile. A través de su obra, Montoya explora los imaginarios visuales, rituales y sonoros de las celebraciones que tienen lugar en las zonas montañosas de Bolivia y el sur de Perú, estableciendo un puente simbólico entre los Andes y el Atlántico. Su presencia en PANTRANSA introduce una nueva capa de interpretación, entretejiendo referencias culturales en la densa trama estética y conceptual del bloco. Uno de los gestos más significativos de su participación es la incorporación de un nuevo color a la paleta cromática tradicional de PANTRANSA. Al negro, rojo y blanco se suma el dorado, trabajado a través de la técnica del entorchado, una práctica artesanal que proviene de los decorados eclesiásticos y que recubre los trajes tradicionales de las festividades andinas. La introducción de este elemento no solo amplía el espectro simbólico del desfile, sino que también plantea un desafío en términos de producción y experimentación material dentro del Barracão, reforzando el diálogo entre diversas tradiciones textiles y visuales. Además de este aporte visual, Montoya desarrolla una performance presentada en el ensayo general del bloco, basada en la figura de la araña, un ser con una fuerte carga simbólica en el imaginario andino. En la cosmovisión aymara, la araña es un puente entre dimensiones, articulando la relación entre el alaxpacha (mundo de arriba), el aka pacha (mundo terrenal) y el manqha pacha (mundo de abajo). Representa el entrelazamiento de tiempos y espacios, funcionando como un símbolo de mediación entre los vivos y los muertos. En la performance, Montoya encarna a este personaje como un destaque dentro del desfile, extendiendo una red tejida por el artista Roosivelt Pinheiro (Brasil) hacia el público presente. Este gesto transforma la escena en una estructura de relaciones, donde la red no solo es un objeto visual, sino un dispositivo de participación activa que disuelve las fronteras entre espectadores e intérpretes. Con ello, se refuerza la naturaleza circular, no jerárquica e integral de la experiencia. La presencia de Montoya en PANTRANSA también abre un espacio de reflexión sobre las dinámicas coloniales, decoloniales y anticoloniales que atraviesan el carnaval como manifestación cultural. La samba-enredo de este año incorpora referencias al libro "A Terra dá, A Terra Quer” (Antônio Bispo dos Santos, 2023) , un texto fundamental en el debate sobre el territorio, la ancestralidad y la resistencia indígena en Brasil. La relación con la tierra, tanto en su dimensión material como en su carga simbólica, se convierte en un eje clave del bloco, que no solo transita por la ciudad, sino que la reconfigura temporalmente como un territorio vivo de encuentros y fricciones. En este sentido, la introducción del imaginario andino en PANTRANSA no es solo un gesto estético, sino una intervención que pone en tensión la construcción hegemónica del carnaval, abriendo nuevas posibilidades de lectura y experiencia dentro de la fiesta. Texto: Daniel Aguayo.
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